El voluntariado y todas las actividades vinculadas al Tercer Sector han comenzado a reactivarse poco a poco tras el parón sufrido en los últimos meses a causa del Covid-19. En los tiempos más difíciles de la pandemia, algunas organizaciones se vieron obligadas a interrumpir toda su actividad, si bien otras pudieron transformarse y adaptarse para poder seguir prestando ayuda a los colectivos más vulnerables, en buena parte gracias a las nuevas tecnologías y al formato virtual de las acciones de voluntariado. Ahora, tras la desescalada y en este nuevo escenario que nos toca vivir hacia la nueva normalidad, el voluntariado también debe adaptarse a los nuevos cambios, al menos hasta que exista un tratamiento efectivo y una vacuna contra el virus, que nos permita retomar nuestra vida tal y como era antes de la llegada del coronavirus.
Por ello, y con el fin de que la labor de voluntariado, tan imprescindible en los tiempos que corren, pueda llevarse a cabo de forma segura, la Plataforma del Voluntariado de España (PVE) ha presentado recientemente una Guía de “Buenas prácticas y recomendaciones durante la desescalada y la llegada de la nueva normalidad”. Un documento que recoge una selección de recomendaciones y medidas de contención adecuadas para garantizar la protección de la salud de los voluntarios y trabajadores frente a la exposición a la Covid-19 en el sector de los Servicios Sociales.
Dada la heterogénea realidad de las entidades de voluntariado y de las diferentes acciones que llevan a cabo, la PVE ofrece en este documento orientaciones de carácter general que pueden personalizarse y adaptarse a las distintas actuaciones, a los diferentes colectivos atendidos y a los espacios en los que se realizan los programas. Por sus especiales características y por tratarse de la población más vulnerable frente al virus, todos los proyectos vinculados a la atención a mayores en residencias o en domicilios pueden quedar excluidos de estas directrices generales.
La guía ofrece, a su vez, información relativa a los requerimientos legales para entidades en esta nueva realidad. Será así de obligado cumplimiento dar formación e información a las personas voluntarias; proporcionar a la persona voluntaria los medios para el ejercicio de la actividad y medios de protección necesarios; seguro de accidentes, etc. El documento incluye, además, las medidas organizativas por parte del conjunto de entidades y ONG, así como un apartado con los principales aspectos a tener en cuenta antes de realizar un voluntariado.
Asimismo, también realiza un recorrido por los diez ámbitos del voluntariado (voluntariado social, cultural, deportivo, ambiental, educativo, comunitario, ocio y tiempo libre, socio-sanitario, Protección Civil, voluntariado internacional y Cooperación al Desarrollo) en este momento de “nueva normalidad.
Si estás pensando hacer un voluntariado, te animamos a consultar esta guía de buenas prácticas en la web de la PVE, que te será seguro de mucha utilidad.