De beneficiarios a voluntarios

Devolver todo lo que te dan. Muchas personas asemejan el voluntariado con un boomerang de ida y vuelta en el que recibes todo lo que das y das todo lo que recibes. Y es que no hay mayor felicidad que hacer felices a los demás. Eso mismo es lo que sienten varios colectivos que han decidido poner en práctica todo lo bueno que reciben para volcarlo en otros grupos necesitados.

Algunos de los proyectos que han participado en los VII Premios al Voluntariado Universitario de la Fundación Mutua Madrileña se basan en hacer voluntarios a los propios beneficiarios. ¿Te animas a descubrirlos?

Sensibilización Social y crecimiento entre generaciones es un proyecto intergeneracional puesto en marcha por alumnos de la Universidad de Valladolid y la Fundación San Cebrián, que acerca a adultos con discapacidad intelectual a personas mayores que viven en diferentes residencias. Una vez al mes se realizan talleres en los que intervienen ambos colectivos y descubren la importancia de cuidarse unos a otros.

Poniendo mis capacidades al servicio de las personas mayores es una iniciativa realizada por alumnos de la Universidad Autónoma de Madrid y la Fundación Prodis en la que participan tres jóvenes voluntarios con discapacidad intelectual que dan compañía y realizan actividades de ocio dirigidas a personas mayores que están en soledad.

#quenadatepare es un proyecto desarrollado por varios estudiantes de diferentes universidades y la Fundación Montblanc. El programa persigue que las personas con Síndrome de Down realicen actividades de voluntariado con niños huérfanos y con distintas discapacidades en Jerusalén. El hecho de viajar fuera de España reporta a este colectivo nuevas experiencias y una nueva mentalidad frente al mundo.

Si el voluntariado es una de las cosas más maravillosas y gratificantes que existen en el mundo, la participación de voluntarios en este tipo de proyectos adquiere aún mayor valor dado que, en definitiva, se ven beneficiados dos colectivos al mismo tiempo. Acciones como éstas reflejan, a su vez, el gran compromiso de personas que, pese a contar con algún tipo de discapacidad, son capaces de hacer grandes cosas en favor de otros colectivos desfavorecidos desde el voluntariado. Todos, seamos como seamos, podemos aportar nuestro granito de arena al voluntariado. Ellos ya lo han hecho ¿y tú?

 

Esta entrada se publicó en Blog el 11 marzo, 2020